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1. El otro día estaba en medio de un libro, cuando una afirmación me dejó pensando. Decía que los recuerdos tienen alrededor de un 30-40% de efectividad.
Es decir, cualquier recuerdas algún evento del pasado, usualmente es peor de lo que la mente te dice.
Yo no vivo en el pasado, pero siempre he sido he fantaseado con la idea de que lo de antes era mejor, especialmente cuando hablo de fútbol o de la NBA. Esa afirmación del libro me cambió ligeramente la perspectiva o al menos me hizo dudar.
Lo que no puedo negar es que exactamente en el momento que Drew Brees lanzó la primera intercepción ante los Vikings, lo primero que se me vino a la mente fue el libro.
Fue un como un “flashback” en tiempo real. Un momento… esta historia yo la he visto antes y varias veces. Tal vez… no se trata de algo tan bueno como yo recordaba.
Explico:
Todos tenemos en la retina las grandes proezas de Drew Brees y los Saints en playoffs, y como son tan difíciles de vencer. Eso te dicen los recuerdos, eso fantasea la mente.
¿Y la realidad?
Los Saints entran al campo sumamente favoritos ante X o Y rival, vienen de un año donde su ofensiva es indetenible, están en casa, todo el mundo los pone en la siguiente ronda e inexplicablemente… fallan a la hora grande.
¿Será que Drew Brees no es el gran quarterback que pensábamos? ¿Estaré fantaseando con un pasado donde Drew ganaba los partidos de playoffs y tal vez nunca existió?
El 2009 ahora luce como la excepción, pero ¿qué ha pasado desde entonces?
Vamos al año siguiente luego de ganar el Super Bowl. Los Saints eran re contra favoritos en Seattle ante un equipo de los Seahawks que accedió a playoffs con marca de 7-9.
No solo Seattle venció a New Orleans de manera sorpresiva (ese es el partido del famoso video de Beast Mode), sino que Brees fue detenido la mayoría del tiempo a pesar de lanzar 404 yardas.
¿Cómo hablas de que lo detuvieron si lanzó tantas yardas? La mayoría fue en tiempo basura tratando de regresar de un mal partido. Drew intentó 60 pases ese día.
El año siguiente los Saints pierden en la ronda divisiones ante San Francisco en aquel juego de Vernon Davis. Brees y compañía caen ante los Niners de Alex Smith, quien por alguna razón fue más “clutch” que Drew en ese momento.
Luego del 2014 al 2017 se perdería tres rondas de playoffs de manera consecutiva.
Lo que nos lleva a lo sucedido en los últimos tres años. Los Saints han perdido sus últimos tres partidos de postemporada en la última jugada de cada uno de esos juegos, contra un rival inferior, jugando dentro de un domo y con Drew Brees lanzando cuatro intercepciones en total durante estos partidos.
Se trata de 10 intercepciones como total en los últimos 8 juegos de Drew en postemporada.
La narrativa de Peyton Manning durante toda su carrera fue que era el mejor mariscal de campo en la historia de temporada regular, pero que en playoffs se convertía en un espécimen inferior.
Tras ver los datos de Drew Brees en los últimos años y su intento fallido en la última década de llegar a un Super Bowl, me parece que es tiempo de ponerlo en esa categoría.
Ambos ganaron el Super Bowl por lo que no le deben nada a nadie, pero sus carreras daban para muchísimo más.
La memoria nos ha engañado ha romantizar la grandísima cantidad de anotaciones de Drew Brees en su carrera, pero de esas hay poquísimas cuando más importa.
Para el aficionado de los Saints debe doler enormemente la Era que no fue. La franquicia tuvo tres equipos de Super Bowl armados de pies a cabeza y falló de manera abrupta durante tres años consecutivos.
Por más que todos amemos la improbable historia de Drew Brees, sus pobres actuaciones en playoffs se están volviendo recurrentes, y ese eventualmente podría ser su legado.
2. Mike Zimmer se comió a Sean Payton.
Payton merece igual de culpa que Brees, porque en estar tres derrotas, los entrenadores contrarios han logrado detener su ataque y él no pudo con los ajustes dentro del juego, que son tan importante, sino más, que la preparación previa al partido.
3. Kirk Cousins saldrá en todas las portadas y con justa razón, pero Danielle Hunter y Everson Griffen son la gran razón de que los Vikings ganaran en New Orleans.
Entre los dos fueron responsables de las tres capturas sobre Drew Brees, pero en especial de como el mariscal de campo, futuro salón de la fama, nunca se sintió cómodo en todo el domingo.
4. Fue muy evidente que las piernas de Dalvin Cook estaban completamente descansadas durante este partido.
Podría ser una estrategia a futuro para los entrenadores. Descansar al corredor principal en las últimas semanas para que llegue con toda la energía a postemporada, especialmente porque son los que más castigo reciben durante el año.
5. En playoff poco importan si los números son bonitos o no. Se trata de completar un pase o una jugada en el momento oportuno. Ese distintivo “clutch” que queda en la retina de los aficionados y las cámaras de NFL Films.
El pase de Kirk Cousins a Adam Thielen de 43 yardas en tiempo extra es precisamente ese momento para el mariscal de campo.
Toda la presión de no poder ganar juegos importantes acabó con ese pase completo. No ha ganado, el Super Bowl, ni siquiera está en una final de la NFC, pero ganar en New Orleans en un escenario de vencer o morir te debe generar una confianza que nunca has tenido en la vida.
Este fin de semana Kirk Cousins fue clutch, y no podemos debatir al respecto.
6. Esa fue apenas la 7ma victoria de Kirk Cousins en su carrera ante un equipo con récord ganador.
También es la primera vez que ganó un partido en tiempo extra.
Y por supuesto, es la primera victoria de playoffs en su carrera.
7. Ese partido de Buffalo y Houston fue tan pésimamente “coacheado” que acabo siento muy entretenido.
¿Nos les ha pasado que tienen amigos que le “pegan algún tipo de estupidez” cuando se reúnen con ellos?
Son ese tipo de amigos que hacen bromas tontas de las cuales no te puedes parar de reír, que no tienen una conversación muy inteligente, pero las pasas de maravilla.
Bueno eso, le acabó sucediendo a Sean McDermott de Buffalo. Bill O’Brien es tan mal coach tomando decisiones dentro del partido, que le acabó pegando “la estupidez” a McDermott.
Las decisiones de ambos en la segunda mitad y en el tiempo extra parecían un ajedrez de como no ganar un partido de postemporada.
Al final O’Brien sacó la tarea porque Deshaun Watson es uno de esos tipos que se rehúsa a perder. Cuando digo esto, no significa que sea invencible, sino que el rival va a tener que doblegarlo hasta el límite para poder derrotarlo. Hay pocos de esos en la liga, Deshaun es uno, y así ha sido su carrera desde College.
8. Siento que Buffalo dejó su identidad de correr el balón en el momento más importante del juego y eso les terminó costando el partido.
Aunque si somos honestos, una ventaja de 16-0 debería darle un pase a la ronda siguiente.
9. De los ocho mariscales de campo que jugaron esta semana, solo Russell Wilson lanzó para más de 300 yardas.
10. Hemos discutido por todo el año el espejismo que eran los New England Patriots del 2019.
El tema de la ofensiva era más obvio. No se puede arreglar la falta de talento.
Sin embargo, la mayor curiosidad estaba en el costado defensivo. Los Patriots acabaron el año como la mejor defensa de la liga estadísticamente, sin embargo, nunca se sintieron tan dominantes, especialmente en la segunda mitad de la temporada.
Uno de los mejores atributos de Bill Belichick como entrenador en jefe es quitarle al rival su arma más poderosa y vivir con los resultados.
New England técnicamente lo hizo. Secó al novato WR AJ Brown a una recepción de cuatro yardas. El problema fue que Belichick identificó mal “el arma más poderosa” de Tennessee.
Derrick Henry lució como un gigante entre niños en Gillette Stadium. El drive del segundo touchdown de los Titans lo vio a él ser el único jugador que tocó el balón en esa serie ofensiva. Fueron siete jugadas, 75 yardas y un TD. Todas con la tormenta Henry.
La defensa de los Patriots es una que tiene un gran perímetro, pero que pierde usualmente la batalla contra líneas ofensivas de poder. El ejemplo más obvio fue el partido en Baltimore en temporada regular. Tennessee no usa el mismo estilo de juego que los Ravens, pero si el mismo compromiso para correr el balón.
New England nunca estuvo hecho para detener el “Power Football”.
11. Si leyeron la nota de como los equipos ganan o pierden el Super Bowl, recordarán que mencioné que a los Ravens les duele los equipos corredores, y eso hace del partido entre Titans y Ravens un pareo muy fascinante.
El problema de esa teoría es que no tengo idea como hará Tennessee para detener a su contraparte de Lamar/Ingram.
12. Siento que los Patriots quieren pasar la página con Tom Brady, pero no pueden hacerlo por toda la historia entre ambos. De hecho, es un momento incómodo.
Es como cuando tienes a un hijo de 35-40 viviendo en tu casa. No lo quieres echar porque es tu hijo y lo amas por sobre todas las cosas, pero le tiras todas las indirectas del mundo para ver si entiende por sí solo que el tiempo de irse ha llegado.
13. Usualmente los Patriots responden agresivamente en la temporada baja cuando quedan eliminados.
No sería reconstruir, sino recargar.
14. No hay mucho que comentar sobre Seattle en la ronda de Wildcard. Se enfrentó a una enfermería e hizo lo que necesitaba para ganar.
Los Seahawks son ese equipo que juega al límite. Si tienen un rival excelente al frente te regresa la excelencia, si tiene un rival pobre al frente te juega con pobreza.
Es muy latinoamericano de su parte.
15. Los Seahawks registraron 28 capturas en todo el año, que es la segunda peor marca de TODA la NFL. Ante Philly lograron 7 en un solo partido.
16. El duelo entre Russell Wilson y Aaron Rodgers tendrá a los dos mariscales de campo que lanzar el balón largo más perfecto de la NFL, con equipos limitados, y que seguramente los necesitarán con traje de Superman para consumar esta victoria.
No puedo esperar.
17. Por cierto, Wilson y Rodgers son los únicos QBs restantes en estos playoffs con una victoria de Super Bowl.
18. Cuando crees que Jason Garrett no se puede humillar más, el tipo siempre tiene otro As bajo la manga.
Que Jason Garrett no se quiere ir de Dallas.
Es como una serie cómica. pic.twitter.com/l98yYiQUsg
— Alonzo Solano (@DondeAlonzo) January 5, 2020
19. Los Saints están 1-5 en postemporada durante la era Brees-Payton cuando entra al último cuarto perdiendo. Esa única victoria fue en el Super Bowl ante los Colts.
20. La otra semana hay final de College Football. Aquí está el previo entre LSU vs Clemson http://bit.ly/2ujcFH3
21. Luz verde con el Podcast 2020. Iniciaremos tras la temporada de Football Americano.
22. Iniciamos el 2020 con una posible guerra entre Iran vs Estados Unidos, los Patriots y los Saints eliminados, Kirk Cousins ganando en playoffs, Bill Belichik luciendo abrumado por otro head coach, Tom Brady como agente libre, los Titans y los Texans en la ronda divisional.
El 2020 nació borracho o mínimo enfermo.
Enero del 2014, Denver, estadio Mile High. Recién corrieron unos minutos tras la clasificación los Broncos al Super Bowl 48, perdido en el estadio -algo que me pasa a menudo- me encontré en un pasillo aislado frente a frente con una leyenda viviente de la liga. 'Buen juego', le dije sin pensar mucho, 'Gracias' respondió el 18 mientras extendió su mano para saludarme. Una gran anécdota, pero de inmediato entendí que la suerte estaba echada para los Broncos. Acabé con la suerte del gran Peyton Manning.
