Estos son algunos Pensamientos alrededor previo a la temporada 2023 de los New England Patriots de la NFL.
Hay momentos en la vida en los que uno se convierte en su propio enemigo, ya sea, por falta de confianza, una mala actitud o por simplemente tener un enorme ego que no nos deja ver hasta el camino más sencillo.
Los New England Patriots del 2022 fueron presa del ego de Bill Belichick. No es la primera vez que esto sucede y me pregunto si será la última. Recordaremos cuando el head coach sentó a Malcolm Butler en el Super Bowl 52 sin decirle el plan al resto de su equipo, solo para permitir 41 puntos de los Eagles y perder la posibilidad de ampliar su joyería personal.
Como ese movimiento de Butler, en el que te rascas la cabeza intentando adivinar qué fue lo que pasó, Belichick decidió traer a su amigote Matt Patricia y darle el trabajo -no oficial- de coordinador ofensiva, sin que el barbas de lápiz en la oreja y hoja laminada, tuviera nada de experiencia en ese lado del balón.
La decisión de Belichick fue presa del síndrome: “yo sé más que el resto”. El diagnóstico al final de temporada fue el segundo año post la era Tom Brady sin llegar a playoffs y la tercera temporada consecutiva sin ganar un juego de postemporada.
Ahora, William Stephen Belichick no está entrenando por su trabajo ni mucho menos, pero su legado podría recibir una abolladura inesperada en el final de su carrera si no tiene el mismo éxito que en los años con los que contó con el mejor mariscal de campo de todos los tiempos.
El 2023 también, podría ser el punto de quiebre para la carrera del quarterback Mac Jones, quién fue una víctima directa del ya mencionado ego de Belichick en el 2022.
¿Qué Me Intriga De Los Patriots En El 2023?
Es inevitable sentirse intrigado por la mancuerna entre Mac Jones y el recién llegado Bill O’Brien. Jones tendrá en O’Brien su tercer coordinador ofensivo en tres años, algo que está lejos de ser la receta ideal.
Sin embargo, solo el hecho de no tener la incompetente voz de Matt Patricia hablándole al oído ya es suficiente ganancia para el mariscal de campo. Jones y O’Brien se conocen desde antes, pues, Mac fue quien ayudó a Bill a aprenderse la ofensiva de Alabama cuando O’Brien tomó ese puesto en el 2021.
Pero, además, existe la intriga de saber cómo será Bill O’Brien en su segunda oportunidad en New England. La NFL ha cambiado bastante desde el momento en el que él dejó su puesto para irse a Penn State.
Si bien es cierto la liga tiene muchos más espacios y libertades ahora, también hay mucha más información que obliga a quienes toman las decisiones a ser mucho más agresivos en cuartos downs, y de no hacerlo, caerán críticas por doquier tras cada encuentro.
Ofensiva de los Patriots en las manos de Bill O’Brien:
Temporada 2010
- Puntos por juego: 32.4 (1°)
- Yardas totales: 363.7 (8°)
- Yardas aéreas: 240.4 (11°)
- Yardas terrestres: 123.3 (9°)
- Récord: 14-2
Temporada 2011
- Puntos por juego: 32.1 (2°)
- Yardas totales: 428.0 (2°)
- Yardas aéreas: 317.7 (2°)
- Yardas terrestres: 110.2 (20°)
- Récord: 13-3
O’Brien seguramente deberá demostrar que sigue paso a paso las tendencias de la NFL, de otra manera, Belichick habría sumado otro entrenador con un estilo dinosaurio, básicamente como él.
Belichick es el mejor entrenador de todos los tiempos, pero en las últimas temporadas las tendencias de la NFL y equipos mucho más agresivos como Buffalo y Kansas City le han pasado por encima.
¿Cuál Calificación Merecen Los Patriots En Temporada Baja?
La ofensiva de New England fue mayormente insípida el año pasado, inclusive tal vez dejando un mal sabor de boca en sus aficionados. Lo cierto es que nadie sintonizaba la NFL domingo a domingo para verlos jugar.
Una parte fue la terrible decisión de Belichick con el tema Patricia, la otra la desganada calidad en sus líneas. Es simple. Los Patriots no tienen un solo jugador superestrella en su ofensiva y a pesar de varios movimientos en Agencia Libre, eso no ha cambiado.
La llegada de Juju Smith-Schuster para reemplazar a Jakobi Meyers en la ranura es un movimiento interesante que hasta podríamos decir raya en lo cuestionable. Meyers no solo conocía el sistema, sino que había construido confianza y química con Mac Jones.
Y no, no me refiero a los pases de Meyers a Jones, sino al contrario…
Belichick usualmente valora este tipo de intangibles por encima de nombres más prominentes, pero acá decidió por colocar la inversión en Smith-Schuster en lugar de en una cara conocida. Ahora, Juju es un mayor talento que Jakobi, pero en los primeros meses vestido de Patriot ya encendió varias alarmas.
Primeramente, ya hizo el clásico comentario que realizan todos los agentes libres que llegan a Gillete Stadium. Smith-Schuster reveló que está siendo un reto para él aprenderse el complejo libro de jugadas que tienen los Patriots. No es una buena señal.
Y lo segundo, es que ha estado lidiando con una lesión de rodilla que lo mantuvo al margen de la final de la AFC el año pasado, cuando los Chiefs vencieron a los Bengals. Juju se ha perdido campamentos de entrenamiento importantes para solidificar esa química de la que tanto se habla.
New England también tomó las sobras de los Dolphins y se dejó los servicios del ala cerrada Mike Gesicki, quién por alguna razón no encontró espacio en el sistema de Mike McDaniel en Miami. Esa “razón” es que Gesicki no puede bloquear ni aunque su vida dependiera de ello.
Lo que ciertamente tiene a su favor es que sus manos son de las mejores en la posición de ala cerrada y seguramente encontrará espacios en la nueva ofensiva de Bill O’Brien.
Casi 12 años atrás, O’Brien conducía la temible ofensiva de doble tight ends entre Rob Gronkowski y Aaron Hernández. Una década después intentará emular ese éxito con Gesicki y Hunter Henry, aunque esta versión 2023 ciertamente luce como algo comprado de Wish, en comparación con Gronk y Hernández.
La línea ofensiva de los Patriots tendrá 4 de 5 caras familiares. New England por fin se pudo deshacer de Isaiah Wynn, una elección de primera ronda en el 2018 que otorgó más frustraciones que buenos momentos en cinco años.
El problema para los Patriots es que decidieron traer a Riley Reiff para reemplazar a Wynn como tacle derecho. Reiff tiene 34 años de edad y viene de una decepcionante actuación con los Bears en el 2022.
De hecho, Reiff está en su tercer equipo en tres años, luego de alinear en dos de las líneas ofensivas más porosas de los últimos años, tras ser parte del problema en Cincinnati en 2021 y en Chicago en 2022.
Me estoy dando cuenta que este artículo tiene un tono bastante negativo para con los Patriots. No todo son cosas malas para New England, aunque haya que escarbar entre los escombros para encontrar algo puntual por lo que sentirse motivado.
Belichick ha perdido su bola rápida en ofensiva, en parte porque todas las funciones en los últimos años las delegaba a Tom Brady y a Josh McDaniels, pero en defensiva sigue siendo un viejo zorro; además, de que es el costado del balón en el que se siente más cómodo.
Pocos recuerdan o saben esto, pero los Patriots fueron el segundo equipo que más forzó errores de balón en el 2022 con 30, solo los Dallas Cowboys (33) tuvieron más. Parte de su éxito en ese departamento fue tener jugadores con grandes instintos en la defensiva secundaria.
Belichick retuvo a los esquineros Jonathan Jones (11 pases defendidos, 4 INTs), Myles Bryant (6 pases defendidos, 1 INT) y Jalen Mills (5 pases defendidos, 2 INTs) en la Agencia Libre. Todos tenían opciones para marcharse, pero decidieron quedarse.
Entre ellos tres, sumado al CB Jack Jones y al S Kyle Dugger, todos necesitan elevar su nivel al menos un escalón más. Detrás de ellos ya no estará el experimentado S Devin McCourty quién lideró al equipo con 4 intercepciones antes de anunciar su retiro.
Por supuesto, Belichick y el resto de los aficionados de los Patriots también agradecen que durante la mitad de la primera ronda del draft varios equipos decidieron que era buen momento para un pedo mental y acabaron dejando pasar al esquinero de raíces colombianas, Christian Gonzalez, proyectado para ser un jugador top 10 en muchos Mock Drafts.
Entre Gonzalez y el ala defensiva Keion White, elegido en 2da ronda, deberían contribuir desde la Semana 1 en el plan de juego defensivo de los Patriots. White, por cierto, podría ser un as bajo la manga a nivel ofensivo. Sí, leíste bien: ofensivo.
Keion White fue ala cerrada en Old Dominion antes de hacer la transición a ala defensiva. No me sorprendería si en alguna semana lo vemos alineado en su antigua posición, atrapando touchdowns como LB Mike Vrabel (ahora coach de los Titans) lo hizo en la primera parte de la dinastía Patriot.
Llegadas de Veteranos en la Agencia Libre:
WR JuJu Smith-Schuster, OT Riley Reiff, OT Calvin Anderson, TE Mike Gesicki, LB Chris Board, P Corliss Waitman.
Selecciones de Draft 2023:
- R1 (17): CB Christian Gonzalez, Oregon
- R2 (46): EDGE Keion White, Georgia Tech
- R3 (76): S Marte Mapu, Sacramento State
- R4 (107): C Jake Andrews, Troy
- R4 (112): K Chad Ryland, Maryland
- R4 (117): OG Sidy Sow, Eastern Washington
- R5 (144): Atonio Mafi, UCLA
- R6 (187): WR Kayshon Boutte, LSU
- R6 (192): P Bryce Baringer, Michigan State
- R6 (210) WR Demario Douglas, Liberty
- R6 (214): CB Ameer Speed, Michigan State
- R7 (245): CB Isaiah Bolden, Jacksonville State
Jugadores que Salieron en Temporada Baja:
RB Damien Harris, WR Jakobi Meyers, WR Nelson Agholor, TE Jonnu Smith, OT Isaiah Wynn, OT Marcus Cannon, OT Yodny Cajuste, C James Ferentz, S Devin McCourty, P Jake Bailey.
¿Cuál Es La Parte Más Complicada Del Calendario De Los Patriots En 2023?
Imagina lo que debe sentir un fan de los Patriots, acostumbrado a ganar la AFC Este por un par de décadas, solo para verse como el equipo de menos posibilidades entrando al 2023.
New England, además de enfrentar a la división más difícil en el papel, tendrá que verse las caras con la NFC Este, que colocó tres equipos en playoffs el año pasado y ante la AFC Oeste, que tiene al campeón y otras tantas escuadras llenas de talento. Brutal.
Hay particularmente dos trechos en el calendario que no se los deseo ni a mi peor enemigo. En el primer mes de competencia New England iniciará en casa ante los campeones de la NFC, los Philadelphia Eagles y una semana después reciben a los Miami Dolphins, quienes han ganado 4 de los últimos 5 duelos antes los Patriots.
Luego viajan a New York para estrenar a Aaron Rodgers y a los Jets, para cerrar el primer mes en Dallas ante los Cowboys. Es difícil pensar que un equipo de Bill Belichick podría iniciar 0-4, pero en todos esos cuatro partidos los Patriots son la escuadra inferior en cuanto a talento.
La otra parte del calendario que se pone más difícil que Belichick en conferencia de prensa es diciembre y enero.
En la semana 13 recibirán a Los Ángeles Chargers, a quienes Belichick tiene de hijos en las últimas temporadas, pero un nuevo coordinador ofensivo para Justin Herbert debería ser suficiente para que las cosas tomen un rumbo diferente.
Posteriormente visitan Pittsburgh, un equipo que es básicamente un espejo de New England. Los Steelers al igual que los Patriots son una franquicia histórica con uno de los mejores entrenadores de la liga, con un mariscal de campo que está encontrando sus primeros pasos en la NFL y una defensa obligada a cargar a la ofensiva.
Luego los Patriots reciben a los campeones Kansas City Chiefs, visitan Denver, un lugar que siempre le ha costado a Belichick, solo para cerrar en Buffalo en Semana 16 y en casa ante Aaron Rodgers y compañía en Semana 17.
De nuevo, cada uno de esos equipos tiene mejor plantilla que los Patriots. Es un cierre de terror para New England.
¿Quién Tiene La Mayor Presión Dentro De La Organización En 2023?
Volvamos un par de años en el tiempo. Durante la Semana 4 de la temporada 2021, los aficionados de New England tenían el corazón en la mano al ver como el hijo pródigo regresaba a casa vestido de ese horrible color café Bucanero.
Al mismo tiempo, había cierta satisfacción y confianza de que tenían, en Mac Jones, al sucesor de Tom Brady. Nadie está esperando que Jones emule los éxitos de TB12, nadie es capaz, pero la idea de tener un chico joven, inteligente y en completo control de la ofensiva tan solo 2 años después de la partida de Brady era más que suficiente en ese momento.
Volvamos al presente. Hoy las cosas han cambiado sustancialmente. Hay más dudas que respuestas sobre lo que será Mac Jones el resto de su carrera, ya que, muchos de los aficionados que lo apoyaban contra Brady en aquella noche lluviosa de Sunday Night, también gritaron el nombre de Bailey Zappe durante el 2022.
Con o sin culpa, la carrera de Mac Jones está en una encrucijada determinante. En su tercer año Jones tiene que mostrar que es líder de este equipo y a la misma vez elevar su nivel donde se pueda colocar al menos al borde del top 10 de QBs en la NFL.
Cualquier cosa menos que eso significará otra insípida temporada en donde las bajas expectativas se estarían volviendo el día a día de una franquicia anteriormente acostumbrada a la excelencia. Es una situación delicada.
Con tantos mariscales de campo de cualidades extraordinarias actualmente y especialmente en la AFC, ir a la guerra con este Mac Jones luce como enfrentar a un ejército con pistola de agua.
Soy, tal vez, de los pocos, a los que en realidad le gusta el juego de Mac Jones. El tipo es cerebral, buen soldado y de la mano de un buen coordinador ofensivo, puede elevar a sus compañeros.
Sin embargo, esta versión de Jones contra rivales como Patrick Mahomes, Joe Burrow, Josh Allen y el mismo Aaron Rodgers, luce como una pelea injusta. Tampoco es que los fans de los Patriots se pueden quejar mucho luego de tener al bully del vecindario por 20 años.
La presión sobre Jones está en mostrar que es el QB1, pero es imperativo que suba su nivel. En su tercer año, ya no recibe el beneficio de ser un jugador joven. Es todo o nada para Jones en el 2023.
¿Qué Es Una Buena Temporada 2023 Para Los New England Patriots?
Regresar a playoffs es el objetivo de New England, pero eso luce lejos de la realidad. Son el equipo con menos probabilidades de ganar la división de acuerdo a las apuestas y es sencillo de entender porqué; son el de menor talento en general.
Anteriormente los Patriots se arropaban en la idea de que el genio de entrenador en jefe que tiene siempre prevalecía, con el clásico “En Bill confiamos”, pero la confianza en los últimos años ha mermado.
Belichick se ha vuelto más testarudo de lo normal y no tiene en el repertorio de herramientas un mariscal de campo que le dé el lujo de enfocarse solo en la defensa mientras él hace el trabajo.
Las líneas de apuestas tienen el total de victorias en 7.5, por lo que no hay gran expectativa. Mis números dicen que ellos ganarán 7 juegos, pero eso no les alcanza para sonar en postemporada.
Sin embargo, si de valorar que puede ser una temporada exitosa se trata, me atrevo a decir que si New England sale del 2023 con la convicción de que Mac Jones es el quarterback que este equipo necesita, será un desenlace suficiente para considerarlo un éxito.
Este no es el año de los Patriots. Poner las cosas en orden, especialmente en el costado ofensivo es la prioridad. Es sembrar durante esta temporada, para cosechar mejores resultados en el futuro próximo.
