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1. Soy de los que piensan que la secundaria no es una etapa tan crítica en la formación laboral de una persona.
Antes de que me salten por tan “aberrante” opinión, quiero que me lean.
No estoy en contra del colegio, ni de su significado, pero los resultados que puedes encontrar ahí importan poco para la adultez.
En mi casa, por ejemplo, es indiferente si Ilhan, mi hijo, logra un 100 o un 85 en una prueba. No hay un enorme peso en el resultado.
Lo que yo particularmente valoro más es el proceso (sueno como todo un cliché de coach de football americano) que el resultado. ¿En qué falló? ¿por qué falló? ¿cómo se arregla el camino?
O en un efecto más positivo ¿qué se hizo bien rumbo a tales pruebas y cómo se puede repetir eso en el día a día?
La idea es que Ilhan encuentre disciplina, entendimiento y el proceso para cuándo realmente tenga que enfrentar las “balas” de un trabajo o una carrera, y ahí sí, enfocarse directamente en los más altos rendimientos y resultados.
Aquellos 100s y 90s en las pruebas de estudios sociales nadie los recuerda cuando llegas a ser adulto o cuando buscas un trabajo.
Y así como los resultados de la secundaria importan poco, tampoco importa la pretemporada de la NFL y sus resultados.
Suena obvio y la mayoría lo sabemos, pero por cosas tan obvias como estas es que le ponen instrucciones al shampoo.
Los Steelers vieron a su mariscal de campo Kenny Pickett tener una pretemporada absolutamente perfecta, a la ofensiva caminar de una manera imponente y a su criticado coordinador ofensivo generar expectativa tras unos cuantos grandes drives en agosto.
Algunos de sus aficionados saltaron proclamando que serían la sorpresa de la temporada y qué tuvieran cuidado con lo que presentaba Pittsburgh como caballo negro.
Tales proclamaciones duraron menos de un cuarto y la manera en que los 49ers despertaron a los Steelers fue como cuando te levanta un temblor a las 2 de la mañana… te deja desorientado, sin entender qué ha pasado y con algo de miedo para lo que viene.
Fue otro ritmo, otra intensidad y otra jerarquía.
San Francisco no es un equipo que se ande con muchos rodeos. Sus intenciones son de Super Bowl. Si lo pudiese jugar ya mismo lo haría, pero entiende que deben pasar 5 meses antes de encontrarse en ese momento.
Los Niners no necesitan encontrarse y buscar “el significado de la vida”, ellos saben exactamente quienes son, cuál es su identidad de juego y lo que los hace en muchas ocasiones absolutamente indetenibles.
Ante los Steelers no solo lo demostraron, sino que lo hicieron con una seguridad y determinación admirable. Fue como ver a dos equipos jugar un deporte distinto y entender fácilmente que, en la NFL, como en la vida, hay diferentes estatus y Pittsburgh, por lo menos hoy, no tiene como sentarse en esa mesa.
Tal vez el punto más decepcionante de los Steelers fue lo tan poco preparados que se mostraron en Semana 1, algo muy en contra del pedigree del head coach Mike Tomlin.
Si yo les vendo múltiples escenarios de cómo se desarrollaría este juego, el último de ellos sería encontrar a un equipo de Tomlin con tan poca energía, abrumado por el rival y sin respuestas ante lo que tenía enfrente. Ese escenario no me lo compra ni el aficionado que más odia a los Steelers.
Pero así fue.
La Semana 1 siempre da para muchas sobrerreacciones, por lo que la derrota de Pittsburgh eventualmente la podríamos llegar a olvidar si el equipo empieza a ganar, pero lo cierto es que nos reafirma que los resultados del colegio o en este caso de la pretemporada, significan muy poco para la vida real.
2. Nota mental para cada inicio del año: la -mayoría- de las ofensivas apestan y las defensivas -la mayoría del tiempo- tienen la de ganar.
Todos los años se nos olvida.
3. El año pasado, lo más que corrió Christian McCaffrey fueron 121 yardas; para el 3er cuarto ante los Steelers ya tenía 134 yardas y al final acabaría con 152, lo que habla del absoluto dominio que tuvo San Francisco en el juego.
Además, CMC registró 112 yardas tras el primer contacto y se convirtió en el primer corredor en las últimas 15 temporadas en lograr más de 100 yardas por tierra luego del contacto, en un partido ante Pittsburgh.
4. Brock Purdy nunca ha perdido en temporada regular en su carrera. Es poca la muestra, pero está 7-0 hasta ahora.
Además, en los 6 juegos en los que fue titular, lanzó 2 TDs en cada uno, siendo el primer QB en la historia de la NFL en lanzar 2 TDs en sus primeros 6 partidos y ganar cada uno de ellos.
Más allá de los números, la calma que mostró ante la usualmente temible línea defensiva de Pittsburgh habla de la confianza que él tiene en el sistema, y la confianza que el sistema (Kyle) le tiene a él.
Se nota cómodo, sin fantasmas que lo acechen y con calidad en cada uno de sus pases.
Sin embargo, su mejor jugada el partido fue recuperar el fumble con las nalgas. Está lleno de recursos el tipo.
5. TJ Watt logró 3 capturas ante los Niners y ahora está empatado con James Harrison con 80.5 capturas con la franquicia de Pittsburgh
6. Lo más curioso del resultado de los Steelers es que a pesar de la paliza en su contra, ellos no fueron el peor equipo de la AFC Norte.
Esa distinción le pertenece a los Bengals, a quienes se les está volviendo costumbre el arrancar la temporada con una apatía descomunal.
Joe Burrow tiene ahora marca de 1-3 en juegos de Semana 1, con la única victoria en un partido que los Vikings escupieron en el 2021.
¿Qué tan malo fue el juego de Burrow ante los Browns de este fin de semana?
- El rating de pasador de Joe fue de 52.2, el peor en su carrera en la NFL.
- Además, lanzó 82 yardas, la menor cantidad en su carrera en la NFL.
- Su porcentaje de pases completos fue del 45.2%, el menor en su carrera en la NFL.
- También fue la primera vez que tuvo un juego de menos de 100 yardas aéreas en su carrera.
Para ponerlo en perspectiva, la única vez que Patrick Mahomes lanzó menos de 100 yardas fue en el 2019, cuando registró 76 yardas y eso fue porque jugó medio partido ya que su equipo tenía mucha ventaja.
Los Browns están 5-1 contra Burrow, claramente no le tienen miedo y le tienen exactamente la medida.
Pero las cosas ahora serán más complicadas en el futuro, pues Cleveland contrató a Jim Schwartz como su nuevo coordinador defensivo.
Schwartz es un maniático.
Esto fue lo que escribí en parte del previo de los Browns de esta temporada:
“Ante la salida de Joe Woods, los Browns voltearon la mirada a un veterano coordinador defensivo, excesivamente energético, con un ego del tamaño de los bíceps de Myles Garret y anteriormente campeón del Super Bowl: Jim Schwartz.
Para aquellos que son nuevos en esto de la NFL, lo primero que tienen que saber es que Schwartz es todo un personaje. Aquellos que han seguido la liga en la última década no me dejan mentir.
Schwartz se ganó el puesto de entrenador en jefe en los Detroit Lions en el 2009 luego de un buen período como coordinador defensivo de los Titans.
En Detroit llevó a los Lions a su primera aparición de postemporada en 12 años, pero su mejor momento fue cuando se peleó con el entonces entrenador de los 49ers, Jim Harbaugh, simplemente porque no le agradó la manera en que Harbaugh le dio la mano al final del partido. Chequen el video:
Les dije que el tipo era intenso.
Tras salir de Detroit, su mejor paso fue en Philadelphia, en donde logró ganar el Super Bowl como coordinador defensivo de los Eagles en el Super Bowl 52. Aunque no sé si esté dispuesto a sacar tanto pecho por esa actuación, luego de permitirle 500+ yardas y 31 puntos a Tom Brady. Supongo que anillo es anillo.
Schwartz dejó Philadelphia por intenso problemas de salud y desde el 2021 funcionó como asistente defensivo en un rol de consejero para Mike Vrabel y los Titans.
En general, la contratación de Jim Schwartz con los Browns me intriga, porque su personalidad parece ser justo lo que Cleveland necesita.”
Cleveland tuvo tanta confianza que vean a Myles Garrett jugando “baloncesto” mientras va por Joe Burrow.
7. Tampoco podemos decir que Deshaun Watson tuvo un juegazo, aunque en comparación con Joe Burrow, cualquiera tuvo un gran juego.
Watson aún sigue sin confianza dentro de la bolsa de protección, ausente del timing que tuvo en Houston y esto desembocó en el Tweet de la Semana.
“La capacidad de Watson para mantener la compostura bajo presión claramente se ve obstaculizada por el apresuramiento de los Bengals y el eterno peso del pecado que descansa en su alma”.
Por cierto, los Browns corrieron para 206 yardas ante los Bengals y eso ya no es una casualidad.
Siempre hablamos de la calidad que tiene el coordinador defensivo Lou Anarumo para detener a un tipo como Patrick Mahomes, pero Cleveland ha sido su kriptonita. Vean los números que ha permitido desde el 2020 por tierra:
- Temp. 2023 vs. Browns: 206 yardas
- Temp. 2022 vs. Saints: 228 yardas
- Temp. 2021 vs. Browns: 205 yardas
- Tempo. 2020 vs. Ravens: 404 yardas (Viejo, no es broma. Parece un dedazo, pero no)
- Tempo. 2020 vs. Titans: 218 yardas
- Temp. 2020 vs Browns: 215 yardas
3 de las 6 veces que los Bengals han permitido más de 200 yardas por tierra fueron ante los Browns. Eso está lejos de ser una coincidencia.
8. Con la actuación del domingo, Tua tiene ahora 2 partidos con más de 400 yardas en su carrera.
- Temp. 2022: 469 yardas | 6 TDs | 2 INT vs Baltimore
- Temp. 2023: 466 yardas | 3 TDs | 1 INT vs LA Chargers
Ambos juegos acabaron con victoria de los Dolphins y en ambos, ante mariscales de campo rivales que la mayoría expone como QBs Top 10 en la NFL. Ahh otro detalle, ambas actuaciones en calidad de visitante.
La conversación de que Tagovailoa no puede cargar con un equipo poco a poco se irá disipando. Año con año nos reconciliaremos con la idea de que este mariscal de campo es capaz de ganar en diferentes versiones.
Miren el pase de abajo en 3era y 10 con el juego en la línea. ¿Qué más le quieres pedir?
El tipo es bastante inteligente a la hora de liderar a su ofensiva, sus compañeros confían en él y su entrenador le hace muchos favores con un sistema que básicamente le da las respuestas del examen.
Pero crédito a Tua. Hay mariscales de campo que también reciben las respuestas y aún así fallan a menudo.
Tampoco duele que los Dolphins tengan uno de los equipos más rápidos que jamás hemos visto. Tyreek Hill por sí solo registró 215 yardas y 2 TDs ante la sobrevalorada defensa de los Chargers, y de paso hizo ver a JC Jackson como uno de los peores contratos en la historia de la NFL.
Poco a poco he llegado a la conclusión de que el tema Tua es básicamente estético, pero sin sustancia. A muchos no les gusta como se ve su forma de lanzar, ya que es el único QB zurdo de la NFL.
Se ve raro. Se siente extraño ¿para qué lo vamos a negar? Pero dejando de lado la estética, Tua es efectivo y un muy buen mariscal de campo. Es tiempo de aceptarlo.
Por cierto, solo por contexto, Justin Herbert no tiene un solo juego en su carrera en el que haya lanzado 400 yardas.
9. Jugadores con más yardas durante la Semana 1 en la historia de la NFL:
- 1951 Norm Van Brocklin (554)
- 2011 Tom Brady (517)
- 1994 Dan Marino (473)
- 2023 Tua Tagovailoa (466)
10. Para los Chargers luce como si el tiempo no avanzara.
Brandon Staley, técnicamente de corte defensivo, no puede detener a nadie ni para salvar su vida.
Y Justin Herbert, por más alabanzas que le regalemos, sigue sin ganar partidos cerrados o importantes. De hecho, es una de las cosas que más me frustra, pues, no logro entender como siempre está en el lado equivocado de estos partidos.
Herbert está 25-25 en su carrera en juegos de una posesión de diferencia. Contemporáneos como Burrow (24-18-1) y Tua (24-13) están claramente por encima de .500 en este tipo de juegos.
11. Los Bears básicamente fueron el tipo que pasó mensajeando a la chica por semanas, prometiéndole una salida espectacular y una noche de pasión sin igual.
Sin embargo, a la hora de la hora, no supo qué hacer con ella. Las expectativas fueron tan altas por su propia boca, que nunca iba a poder cumplirlas.
Chicago había esperado tanto la salida de Aaron Rodgers de la división, que pensó que ganar juegos se trataba solo de la salida del mariscal de campo. No entendió que la vida en la NFL requiere muchas otras cosas para ganar.
El aficionado Bear, hoy es el más avergonzado, sin duda alguna.
Nunca entendieron que no hay que firmar cheques que su equipo no puede cambiar.
12. Para Green Bay la victoria tiene un sabor más que dulce. En los últimos años Chicago ha sido la página de dedicaciones en un libro, esa que nadie voltea a ver.
Pero ganarle a los Bears con Brett Favre, Aaron Rodgers y ahora Jordan Love, es solo una pequeña muestra de una paternidad establecida en esta relación. Trae una satisfacción, más por el gusto de ver a los rivales sufrir, que por el valor real de la victoria. Es el sentimiento más puro de dominar una “rivalidad”
13. No hay partido que me haya sorprendido más que la victoria de los Rams en Seattle. Por ningún lado la vi venir y claramente Pete Carroll tampoco.
Me asusté tanto con el marcador como Geno Smith cuando vio a Aaron Donald (Sube el volumen)
Los Rams pusieron 426 yardas totales en la cabeza de Seattle, incluyendo 119 de Tutu Atwell y 119 de Puka Nacua, dos nombres que ni siquiera entrarían en la planilla de los Seahawks.
14. Me encantaría sentarme a reescribir porqué Daniel Jones no merecía el contrato de $40 Millones anuales que le dieron los Giants, pero mejor les comparto este link https://bit.ly/44OUTHc que explica todas las razones y de paso se puede divertir con los comentarios.
Tal vez, hasta se encuentren ahí.
15. Daniel Jones fue capturado en 7 ocasiones.
Por momentos sentí que Brian Daboll lo estaba castigando al dejarlo en el juego, bajo la lluvia, 40 puntos abajo. Una irresponsabilidad.
La línea ofensiva claramente es deficiente, pero también los Cowboys tienen una de esas defensas asesinas de la mano de Dan Quinn, que no reciben suficiente crédito… pues porque son los Cowboys.
El año pasado Dallas lideró a la NFL forzando 33 errores de balón. En semana 1 no perdieron el camino y registraron 3 a la nueva cuenta.
16. Los Broncos han perdido
- 7 seguidos contra los Raiders
- 15 seguidos contra los Chiefs
- 8 de los último 13 ante los Chargers.
Ugh.
17. Si alguien me dice que el Titans vs Saints se jugó bajo un torrencial aguacero, le creo.
El juego registró 5 errores de balón entre ambos equipos, incluyendo este fumble que no solo determinaba 7 pts para Tennessee, sino que las cebras mencionaron, no era fumble… ¿qué?
Por otro lado, bajo el estándar de rating de pasador, Ryan Tannehill tuvo el peor partido de su carrera, con un 28.8.
18. Aquí vamos de nuevo Baltimore…
Los Ravens perdieron al RB JK Dobbins por el resto del año con una lesión en el tendón de Aquiles.
Para el momento que leas esto podría confirmarse que el safety Marcus Williams se perdería todo el año con una lesión en el pectoral.
El LT Ronney Stanley sufrió una lesión de rodilla. Se desconoce la gravedad.
Y el centro Tyler Linderbaum salió también con una lesión de tobillo.
Sin mencionar que el TE Mark Andrews ni siquiera jugó en semana 1… por lesión.
A veces los dioses del football se concentran en hacerle la mala vida a un solo equipo.
19. El amigo responsable de la línea de golpeo en TV se pasó de copas el domingo.
20. Si le digo a un aficionado de los Patriots antes del partido que ganarían la batalla de yardas totales 382-251 contra los Eagles campeones de la NFC, firman de inmediato.
Si les menciono que además forzarían un fumble en el último cuarto sobre Jalen Hurts, me aseguran la victoria.
Lamentablemente para ellos, nada de eso importó.
Ahora, viendo el vaso medio lleno, New England fue uno de los pocos equipos que realmente batalló ante el mal inicio y eso tiene que significar algo bueno. Toma un segundo mirar a los Steelers y Giants para ver como manejaron sus terribles inicios.
21. Los Patriots perdieron el primer cuarto 16-0 ante los Eagles.
La última vez que los Patriots acabaron en el primer cuarto con un déficit en contra tan sustancial fue ante Denver en el 2013, cuando perdían por 17 puntos.
Muchos de ustedes recordarán ese partido, pues New England acabó regresando de una desventaja de 24 puntos ante Peyton Manning y los Broncos en un domingo por la noche.
Fue uno de los regresos más épicos de la era Brady – Belichick. Eran otros tiempos.
22. La AFC Oeste:
23. Los Bucs promediaron 3.6 yardas por jugada… y aún así ganaron el partido.
24. 41 yardas por tierra en todo el juego vs. los Bucs dicta que los Vikings o extrañan de entrada a Dalvin Cook o no tienen intenciones de correr el balón con Alexander Mattison.
Con Kevin O’Connell, los Vikings perdieron el arte de correr el balón, el cual en muchos momentos fue su fortaleza, al menos en la era Mike Zimmer.
25. No hay mucho por destacar de Houston en la derrota en Baltimore pero la defensa mostró algo esperado a la personalidad de DeMeco Ryans, liderado por el novato Will Anderson, quien tuvo un juego importante.
Anderson igualó a Nick Bosa y a Josh Allen -el otro, en presiones al mariscal de campo en su partido de debut.
Para ponerlo en ejemplo, miren esta captura. Sobrevive un holding absolutamente descarado y logra capturar a Lamar Jackson al no rendirse en la jugada. Ese esfuerzo es lo que le pides a tus novatos con estrella.
26. En la historia de la NFL, ningún equipo había:
- Perdido 40-0
- Perdido la batalla de capturas 7-0
- Perdido la batalla de errores de balón 3-0
- Tenido un FG bloqueado y regresado para TD
- Lanzado un PickSix
En una misma temporada.
Los Giants, lo hicieron todo en la noche del domingo.
Esto hay que celebrarlo.
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@DondeAlonzo
Enero del 2014, Denver, estadio Mile High. Recién corrieron unos minutos tras la clasificación los Broncos al Super Bowl 48, perdido en el estadio -algo que me pasa a menudo- me encontré en un pasillo aislado frente a frente con una leyenda viviente de la liga. 'Buen juego', le dije sin pensar mucho, 'Gracias' respondió el 18 mientras extendió su mano para saludarme. Una gran anécdota, pero de inmediato entendí que la suerte estaba echada para los Broncos. Acabé con la suerte del gran Peyton Manning.