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El Nuevo Contender en Philadelphia y las Hazañas Personales en Rebotando por la NBA

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En esta vida buscamos estar bien acompañados. Somos seres sociales y por lo tanto queremos pasar nuestros días rodeados de seres queridos y de felicidad. Ya sea a través de la familia, pareja, mascota, amigos o colegas, siempre buscaremos un espacio donde podamos estar seguros, alegres y en paz.

Hablando más concretamente, lo que queremos es hacer click. Encontrar personas con las cuáles podamos ser nosotros mismos. Vacilar hasta que duela reírse, dormir tranquilos sabiendo que en la mañana el trabajo va a estar terminado, o poder tener un espacio seguro cuando las cosas no salgan de la mejor manera. 

Una vez que encontramos a esta gente especial, nuestra vida mejora. A tal punto que puede verse completamente reflejado en nuestro desempeño diario. No se trabaja igual cuando se tiene esa sonrisita que no se quita, así como nunca estamos tan motivados a trabajar en la tarde cuando sabemos que hay plan en la noche.

La compañía correcta es vital para alcanzar las metas. Que lo diga Michael Jordan, cuando no lograba avanzar a sus Bulls y fue con Scottie Pippen que cosechó seis anillos. O también Kobe Bryant que consiguió sus primeros tres campeonatos con Shaq. El Rey LeBron tuvo que irse de su natal Cleveland para buscar a los compañeros ideales para ganar. 

Muchos otros casos podemos buscar en la historia de la NBA, pero nos centraremos en el más reciente de todos: La unión de James Harden y Joel Embiid en la ciudad de Philadelphia.

Sixers ¿Nuevo Contender?

La llegada de Harden le da una cara completamente nueva al equipo de los Sixers. Recordemos que llegó por medio de un traspaso que envió a Ben Simmons y demás compensaciones a Brooklyn. El centro del trade eran ellos dos. A largo plazo se veía más que justo, pero si vemos el impacto inmediato, parece broma cambiar a Harden por un jugador que no quiere jugar.

La gerencia de Philadelphia hizo bien en esperar el traspaso ideal y no desesperarse por mover a su anterior estrella. A fin de cuentas, Simmons es un All-Defensive y crea juego con sus pases, no hay que olvidarlo. Su impacto en los Nets habrá que esperarlo, pero en los Sixers ya parece que están pasando la página, sobre todo cuando Harden empieza a igualar sus récords en el equipo:

Y no solo se queda en lo que Harden hace por sí mismo. Ya conocemos sus virtudes: El ball-handling asesino y lo que sigue después, sea un stepback triple o un ataque a la pintura. Pero su llegada a una ofensiva que giraba en torno a Embiid lo hace volver a una de sus facetas más exitosas, que es el rol pasador. La diferencia con Brooklyn es que en este equipo no se limitará a ser un facilitador.

Jugando con un monstruo como lo es Embiid, la ofensiva se abre. No es para quitarle méritos a lo que hace Kevin Durant, para mis ojos el jugador ofensivo más letal. Es meramente por posiciones. Joel se devora la pintura, es capaz de tener un midrange consistente y el triple lo suficientemente constante como para obligar al centro contrario a ir a toparlo a la línea. 

Esto genera que los defensores tengan que referenciarlo en toda la posesión y en toda el área. Es más que normal ver a Embiid con una doble marca en cada ofensiva, lo que abre a la segunda opción ofensiva, que vendrá siendo Harden. Una de las mejores combinaciones al ataque es tener playmakers tanto en la posición de pívot como en la de base. No hay forma de marcarlos efectivamente en el partido sin dejar grandes espacios en el resto de la defensa, algo que ambos jugadores van a explotar.

Habíamos hablado que la llegada de Harden podía desacelerar la campaña de Embiid por el trofeo al Más Valioso. Con un jugador tan importante como segunda opción, se le quita un poco el peso de guiar al equipo y por lo tanto se le quita también cierto mérito a los ojos de la prensa. Poco importa lo que piensen si los números no cambian y si el equipo sigue y sigue ganando.

Esta pareja va a tener un paso arrollador en las próximas semanas. Parece que se conocen desde siempre, jugando en sintonía y con una explosividad que las defensas simplemente no pueden contener. Prueba de ello, algo en lo que los dos se han alimentado toda su carrera: Los tiros libres.

Si la única forma de detenerlos es con faltas, el negocio no va a salir tan rentable. 

Y si ya detener a estos dos fenómenos es imposible, entra Tyrese Maxey. Cuando se habla de parejas, existe el dicho de que tres son multitud. Me preocupaba que con Harden, Maxey llegara a perder su protagonismo y minutos con el balón. Por ahora, ha estado completamente alejado de la realidad. A los números me remito:

Hay que hacerle doble marca tanto a Harden como a Embiid, y ahora parece que también a Maxey. En el basket, solo se juega con cinco defensores, por lo cual no se puede hacer este esquema. Y recordemos que también hay cinco atacantes. Dos jugadores de los Sixers van a estar completamente solos, esperando el balón. No es defensivamente sostenible.

Así que estamos frente a un nuevo contendiente por la Conferencia Este. Philadelphia ya estaba inmerso en la conversación desde antes de la llegada de Harden. La diferencia es que esto los coloca en la posición de rival a vencer. Los equipos desde ya tienen que ponerse a trabajar en cómo defenderlos en playoffs, más si se mantienen estos números:

Nada más recordar que estamos en la etapa del enamoramiento. Ya llegarán los problemas y los días malos. Como en toda pareja, al principio todo es alegría y felicidad. Lo importante es disfrutar el momento, y estar dispuestos a trabajar cuando se esté cuesta arriba.

La Locura de Ja Morant

Hablar de parejas es muy bonito, pero en esta vida se pasa mucho tiempo en la soltería. La clave está en saber vivirla de manera saludable y disfrutarla. En la NBA hay un jugador que está la está rompiendo en solitario y su nombre ya ha estado sonando desde hace tiempo en la liga. De Memphis para el mundo, Ja Morant.

Es cierto que el núcleo joven de los Grizzlies acuerpa la labor del equipo en ambos costados del juego, pero Morant toma cartas en el asunto y se echa el equipo al hombro. Es la prioridad defensiva de cualquier rival y el partido fluye a través de él. Es el espectáculo del momento, en las redes sociales sobran sus highlights. 

Del lado del basket, hay una estadística que me sorprendió muchísimo y refleja el impacto que ha estado teniendo Ja en estos días:

Vean los nombres debajo de él y las posiciones. Una verdadera locura.

Y no se queda solo ahí. El día lunes 28 se instaló para siempre en la historia de Memphis, siendo el primer jugador en la historia de la franquicia en anotar 50 puntos en un partido. Se veía venir un juego histórico cuando logró este buzzer-beater al final del tercer cuarto:

¿Cómo lo logró? Es un misterio.

Aún más importante el logro cuando se recuerdan los partidos que tuvo días anteriores, con saldo de 1-1:

Ja se ha dedicado a generar un nombre por sí mismo, rompiendo un poco con esa maldición del segundo seleccionado en el draft. Es una completa estrella y su espectáculo beneficia muchísimo a la  liga. Los Grizzlies están completamente metidos en la postemporada por la Conferencia Oeste, esperando el eventual desliz de los Golden State Warriors para tomar el segundo puesto.

Su nombre está en la conversación del Más Valioso (está en +960) tanto por el récord del equipo como por sus números propios. No lo veo ganándolo, pero por otro lado es mi apuesta segura para el premio de Most Improved Player. Sabe poco para las aspiraciones de Morant, pero creo con el antecedente de Doncic la prensa le va a dar este premio.

¿Cuánto le durará el show a Ja? Es lo que queremos ver. No se ve sostenible en playoffs y estamos a la espera de qué puede dar Memphis contra los equipos fuertes. No estaban contemplados como candidatos a llevarse la Conferencia, por lo cual su desempeño es un misterio. Como eventual segundo sembrado como mínimo deben ganar una serie.

En cuanto a Ja, esperemos que sea respetado por las lesiones. Ya se ha visto esta locura en jugadores como Derrick Rose, cuya llama se vio apagada por una lesión tan dura. Cada caída de Morant da flashbacks de aquellos jugadores que tenían un futuro tan prominente, pero que el cuerpo no pudo cumplir y quedan relegados al segundo plano.

Por ahora, su mente está en sobresalir en postemporada y sumar méritos para la conversación de MVP, ya sea esta como en la próxima temporada. Las volcadas y los puntos van a seguir viniendo, así que seguiremos escuchando su nombre por mucho tiempo más. Para una leyenda como Allen Iverson, está más que claro:

Y cerrando el tema de los solteros, que casualmente también son candidatos al premio de Más Valioso, hay que mencionar tanto a Luka Doncic como a Nikola Jokic. Me gustaría tocar también el tema de DeMar DeRozan, pero los Bulls están mucho mejor armados que los equipos de los anteriormente mencionados. Tal vez solo dejar sus stats por aquí:

Esperemos que la salud llegue a Chicago y ya puedan acompañar a DeMar.

En cuanto a Luka, es como esta persona que estaba en una terrible relación y que ahora la vemos brillar como tenía que ser. Ya anteriormente tocamos el fallo que fue Porzingis en Dallas y cómo Luka Magic maquillaba un poco la disfuncionalidad. Ahora que ya no tiene que cargar con eso, lo vemos jugar de manera aún más espectacular. 

Ha vuelto a poner su nombre en la conversación de MVP, y a este punto será debatible cuando la temporada termine. Tal vez Dinwiddie o Brunson no sean la pareja ideal para Doncic, pero complementan mucho su juego, por lo cual brilla más el esloveno. No hay que dejar por fuera el gran trabajo que ha hecho Jason Kidd en su primer año, esto va para ratos.

Y por último, el serbio Jokic que hace hasta lo imposible por su equipo. Vive de gran manera la soltería deportiva, pero va siendo tiempo de que reciba algo de compañía. Es el amigo que todos queremos ver ya con una pareja que lo llene de mucho amor y potencie su vida. 

Los Denver Nuggets no valen un cinco sin Jokic. Es por esto que para mí es el Jugador Más Valioso de esta temporada. El juego de los Dallas Mavericks es vistoso y emocionante, mientras que el de los Nuggets es dependiente de Nikola. A pesar de esto, están casi con el mismo récord. No hay manera de explicar la grandeza del serbio.

Ya llegarán de vuelta tanto Michael Porter Jr. como Jamal Murray. Esperemos que sean pocos partidos para Jokic en los que tiene que ir apagando todos los fuegos para que el equipo luzca bien, y que afinen a tiempo para ser una presentación decente en playoffs.

Los Verdaderos MVP‘s

Ahora que mencionaba algunos de los nombres que están figurando en la conversación del Jugador Más Valioso, tengo que hablar también de un par de jugadores que no lo van a ganar. Pero deberían. Y la razón es simple: Sin ellos, su equipo no camina. 

Jokic es un ejemplo de esta categoría, Embiid pre-Harden también lo era, vimos la miseria que es Brooklyn sin Durant y LeBron ya no sabe qué hacer para que los Lakers no den pena ajena. No me refiero a ellos. Estos dos no tienen tal vez el perfil de súper estrella, pero son muy valiosos para el correcto funcionamiento de sus cuadros. Hablo de Draymond Green y de Gordon Hayward.

Para los aficionados casuales de la NBA y para los turistas del deporte, debe verse muy extraño ver a los Warriors perder y perder. ¿Cómo va a ser posible si Steph es el mejor tirador de la historia? ¿No que ya volvió Klay Thompson? ¿Y los 3 anillos de Steve Kerr? El fracaso momentáneo se reduce sencillamente a la lesión de Draymond.

Green está fuera de las canchas desde el 6 de enero. Las estadísticas dicen que jugó el 9 pero hay que recordar que este partido fue la vuelta de Klay, en la cual Draymond entró, saltó por el balón, hizo una falta y salió. Así que ese no cuenta. ¿El récord de los Warriors desde entonces? 15-12.

Pesa más cuando antes de su lesión se encontraban empatados con los Phoenix Suns por el primer lugar y apenas nueve derrotas. Su falta se ha hecho sentir como nunca en el equipo y no parece haber solución. La defensa era la mejor virtud de los Warriors pero ahora se ve completamente diferente.

De poco sirve tener estrellas en la ofensiva si hay huecos en la defensiva.

Un equipo que espere competir por el campeonato no puede derretirse de esta forma cuando pierde un jugador y menos si no es su estrella. El haber construido su juego alrededor de Green le vino a pasar factura al entrenador Kerr, quien debió haber demostrado el por qué es considerado uno de los mejores entrenadores de la historia y no lo logró. 

Nunca he sido fan de Green. Su bocota y juego “sucio” no van conmigo, menos por el hecho de que soy #TeamLeBron. No puedo negar la madurez de su juego en estas últimas temporadas y la importancia que tiene en la cancha, tanto por su liderazgo como por su experiencia. Esta lesión en la espalda no parece ir mejorando, lo cual no pinta para nada bien de cara a postemporada. Hoy más que nunca, lo necesitan.

En cuanto a Hayward, su caso es algo menor comparando a la caída de los Warriors sin Green pero de igual manera considerable. Los Charlotte Hornets ven sus aspiraciones en la media tabla de playoffs de la Conferencia Este, ya sea entre el sexto puesto y el octavo. Ahorita sin embargo se encuentran en el noveno puesto y a juego y medio de salir de play-in.

Gordon se perdió el final de enero así como la gran mayoría de febrero. No ha jugado desde el 7 de febrero cuando tuvo que salir contra Toronto producto de un esguince en el tobillo que lo dejará afuera un mes. Venía saliendo de Covid-19 cuando tuvo esta lesión. Venía siendo muy constante hasta este momento, algo muy positivo considerando las últimas temporadas de Hayward y su salud.

¿Cómo han estado los Hornets sin él? 6-11. No parece ser mucho, pero el estilo de juego cuando él está y cuando no es muy distinto. Antes de entrar a los protocolos de covid a finales de enero, el equipo estaba en la sétima posición y con récord positivo, justo de acuerdo a las aspiraciones del equipo que mencionamos anteriormente.

En este momento, están de novenos como mencionamos y por debajo del .500. 

Gordon no es la estrella del equipo. Este le pertenece a Lamelo Ball y a los jóvenes que han ido consiguiendo vía draft.Tal vez a un precio muy elevado, los Hornets trajeron a Hayward para que inculcara su experiencia y madurez en jugadores que se quieren comer el mundo. Lastimosamente, las lesiones no lo han respetado a lo largo de su carrera y en su paso por Charlotte no ha sido la excepción. 

Con dos años de 30 millones en su contrato, el equipo tal vez buscará mandarlo a que sea exitoso en otro lado. Tienen que solucionar primero el bajón de nivel que tienen cuando él no está en la cancha, ya que lo quieran o no, todavía no cuentan con esa calma que les daba Hayward en sus momentos de titular. No llegar a playoffs podría marcar el fin de él en este equipo.

Es una lástima ver a jugadores como Hayward quedarse a medias de su potencial producto de las lesiones. Le pasó tanto en su paso por Boston como ahora en Charlotte, ese sin sabor de tal vez haber podido hacer más pero no verse en la capacidad de conseguirlo. Por ahora, a esperar por su pronta recuperación y confiar en que su regreso enrumbe a los Hornets.

Más de lo que nos Dejó Esta Semana

Para ir cerrando, mencionar brevemente algunos otros hechos relevantes de esta semana en la NBA. Empiezo con algo que suena extraño esta temporada, debido al hecho de que nos tenían acostumbrados a victoria tras victoria. Los Phoenix Suns perdieron dos partidos al hilo.

A los equipos de la cima se les va a exigir siempre la victoria. Que estas sean apenas las derrotas once y doce respectivamente no es tan alarmante, sumando el hecho de que Chris Paul se encuentra lesionado. De igual manera, el equipo no puede aflojar al último momento, sería muy ajeno a su estilo clutch que los ha caracterizado durante toda la temporada.

En otro tema, los Minnesota Timberwolves poco a poco han estado escalando en la Conferencia Oeste. Siguiendo el refrán de que el que come callado come doble, han ido cosechando importantes victorias contra rivales de peso que confirman la seriedad de su proyecto. Le ganaron esta semana tanto a Memphis como a Cleveland y Golden State.

Habrían tenido semana perfecta de no ser que se toparon con el debut de James Harden en los Sixers, un partido que claramente iban a perder. Igual, vienen formando una base importante en los hombros de Karl Anthony Towns, el cual está viviendo el mejor momento de su carrera. Está tomando por fin ese rol de estrella y líder en el equipo, además de seguir gozando de su victoria en el concurso de triples en el All-Star:

Son tiempos muy diferentes, un centro es clutch tirando triples.

Además, en el equipo se encuentran tanto D’Angelo Russell como Anthony Edwards, jugadores que pueden llevar al equipo a ser un proyecto serio en los próximo años. Su objetivo inmediato es tratar de salir del play-in, pero de no hacerlo, ser un rival más que incómodo contra el primer o segundo sembrado de la conferencia.

El nivel de los Timberwolves es tanto, que ya la NBA está tomando cartas en el asunto:

Es de otro partido, pero no podía dejarlo pasar.

Así como muchos equipos se están perfilando para la postemporada, muchos otros ya están pensando hace ratos en el próximo año. Cuando juegan Pacers, Rockets, Magic o Kings, la verdad no me intereso mucho por el partido. Estos equipos no tienen ninguna intención de figurar positivamente en la temporada, por lo cual mejor enfocarnos en otros partidos.

Un equipo que parece ir saliendo de este grupo es el de los Detroit Pistons. Están perfilando una seguidilla de victorias que los ayuda a ir viendo sobre qué montarse el próximo año. Claramente, es alrededor del primer seleccionado Cade Cunningham, pero también están figurando tanto Saddiq Bey como Jerami Grant. Si logran mentalizar a Marvin Bagley, puede ser un equipo con un gran salto la próxima temporada.

Contrariamente, hay dos equipos que poco a poco se van uniendo a este grupo de irrelevancia y desilusión. Los New York Knicks y Los Angeles Lakers están a poco de que su temporada sea oficialmente terminada. Una decepción total considerando la alta expectativa que ambos traían a inicios de la misma.

Los Knicks se encuentran en la peor de las rachas. No se ve un norte claro y el equipo no tiene esa chispa que tanto emocionó el año pasado. Tal vez incluso rueden algunas cabezas cuando todo acabe. Con los Lakers en cambio, no se puede pensar nunca en tanking cuando LeBron esté en cancha. Pero incluso dejar de jugar pueda ser lo mejor para la salud de este asilo que en algún momento nos engañó con figurar en playoffs.

Mejor, le hacemos caso a Kanye:

Esto sería por la semana. Cada vez más cerca del fin de la temporada regular. Los equipos van a empezar a cerrar filas, descansar jugadores o tirar la toalla con vistas en el futuro. Parece que volverá por fin Kevin Durant, ya veremos qué tanto logra salvar a los Nets, quienes podrían terminar en Play-in.

Nunca había sido tan injusto ser de los mejores equipos del año.

Ya veremos qué pasa. Y lo veremos por aquí mismo, en Rebotando por la NBA.

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Siempre hay chance para ver la mejenga. Nada como comentar con los amigos lo que está pasando en el partido. Todos los días se aprende algo nuevo. Cervezas y hamburguesas for the win. Medicina UCR.

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