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Hace unos días, Tyreek Hill y su agente dieron a conocer los motivos de su salida de los Chiefs. Sus palabras fueron un consuelo para los malpensados, que desde un inicio anticipaban problemas del receptor con el cuerpo de coacheo, por más que Andy Reid parezca más bueno que el mismísimo Santa Claus.
El reclamo tenía que ver con la utilización del receptor en momentos clave de la temporada pasada, cuando, según su agente Drew Rosenhaus, los Chiefs no aprovecharon del todo las cualidades del veloz receptor.
Cuesta trabajo estar de acuerdo con esa versión si uno recuerda el partido contra los Bills, acaso el que más momentos de apremio representó para la ofensiva comandada por Patrick Mahomes. Al vértigo de un duelo donde las ofensivas tenían prohibido fallar, Hill terminó como líder en recepciones y líder en yardas, con 11 y 150, además de esa escapada faltando 1:02, cuando todos pensaron que sería la última, pero no contaban con la resiliencia de Josh Allen y Gabriel Davis para llevarlos al límite.
Más Recepciones, Menos Yardas
Lejos de las jugadas específicas que conforman la colección de Hill en Kansas City, como aquella recepción ante los 49ers en el Super Bowl LIV, cuando una vez más su velocidad salvó a Mahomes de una presión feroz, los números de alguna manera desmienten la supuesta falta de utilización.
Hill completó la mejor temporada de su carrera en cuanto a targets y recepciones, con 159 y 111, respectivamente, superando los 137 targets y las 87 recepciones del 2018.
El registro, sin embargo, no tuvo la suma esperada en yardas totales, con 1239, lejos de lo hecho en la temporada 2018, cuando finalizó con 1479 yardas. En cuanto a touchdowns, también quedó lejos de los 15 de la campaña 2020 y los 12 del 2018, al cosechar apenas nueve. Quizá de ahí venga la molestia, aunque tampoco parece algo definitivo.
En perspectiva con el equipo, Hill terminó como el líder en targets, por encima de las 134 de Travis Kelce, es decir, una vez más la pareja se consolidó como una de las más productivas de la liga.
¿Miami Era La Mejor Opción?
Tyreek Hill encontró 120 millones de razones para buscar un nuevo destino y cambiar los vientos frescos de Missouri por la calidez de Miami. Apelando a la vieja frase de que una mentira repetida se convierte en verdad, el receptor insiste en que Tua Tagovailoa es más preciso que Patrick Mahomes, pero nadie le cree.
Lo cierto es que la confesión del otro día tiene dos vías, la de ida va a los Chiefs, pero la de vuelta a los Dolphins, que ahora deberán tener contento al receptor mejor pagado de la liga, no sólo en lo económico, sino en lo deportivo.
La gran pregunta es si Hill, hambriento de protagonismo, fue al equipo correcto; es decir, no es lo mismo pelear la final de conferencia contra los Bengals que celebrar por ganarle un partido al año a los Patriots.
Hill pasará de una ofensiva diseñada para lanzar el ovoide a lo que suponemos será la filosofía del coach Mike McDaniel, mucho más enfocada en correr, o al menos eso se vio en su etapa como coordinador ofensivo de los 49ers.
Si en los Chiefs era el protagonista junto a Travis Kelce, ahora deberá compartir los reflectores con Jaylen Waddle, líder en recepciones la campaña pasada con 140 y el ala cerrada Mike Gesicki, segundo con 112.
La esperanza, sin embargo, es que el genio de Mike McDaniel diseñe un plan de juego acorde para explotar su velocidad, y esos momentos definitivos que tanto pide.